10 claves para sobrevivir a las reformas de casas
Estas 10 claves para sobrevivir a las reformas de casas te permitirán superar con éxito la prueba que más puede llegar a remover los cimientos de tu tranquila y rutinaria vida. Si estás a punto de lanzarte y estás en el trámite de buscar una empresa de reformas en Madrid, este artículo puede ayudarte a organizarte y priorizar, dos tareas fundamentales cuando se trata de reformas integrales.
La tarea fundamental es planificar para lograr que las molestias se reduzcan al mínimo. Y, sin duda, confiar esa gran inversión en bienestar a una empresa de reformas seria. Pero vayamos por partes… Supongamos que ya has tomado la decisión de hacer la reforma de tu casa. Estas son las 10 claves para sobrevivir a las reformas de casas que todo propietario debería calcular de antemano.
- Prevé las fechas de antemano. Ten en cuenta que en invierno las obras son menos molestas para los vecinos, mientras que en verano son más cortas porque los materiales secan antes. Está en tu mano decidir cuándo quieres realizar la obra. Ten en cuenta que incluso el presupuesto puede variar si decides acometer la reforma de la casa en invierno: se trata de una actividad muy estacional, en la que casi todo el mundo elige el buen tiempo para el inicio de las obras. Lo importante es que no te vayas de vacaciones durante el tiempo que dure la reforma, salvo que sean dos o tres días, y que estés siempre localizable, ya que habrá decisiones (piensa que pueden ser decenas de ellas) que sólo podrás tomar tú.
- Ten un interlocutor único. Ese profesional de las reformas, idealmente un arquitecto técnico, es el profesional que «clavará» como un reloj la entrada y salida de los diferentes oficios en la obra, te mantendrá al corriente de la marcha de la misma y te pedirá opinión y que tomes algunas decisiones concretas sobre detalles que vayan surgiendo en la ejecución de las obras.
- Protege lo que importa. Desde muebles hasta dispositivos electrónicos que puedan quedar cerca de la órbita de la obra, debes guardar o cubrir el máximo de objetos posibles.
- Planifica los espacios de los obreros con el supervisor de la obra. Si finalmente tienes que convivir con la obra, haz saber qué cuarto de baño quieres que utilicen e indica las toallas previstas para ellos. Diles dónde podrán lavar sus útiles y brochas, y dónde almacenarlos mientras dura la obra. Indica también tus preferencias en cuanto a volumen de música, y si pueden, o no, fumar dentro de tu casa.
- Pregunta por las fases de cada oficio y sus horarios. La mayoría de las obras implica que entre de forma paulatina personal de diferentes oficios . Pide al jefe de obra, tu interlocutor, que determine a qué hora vendrán y se marcharán, si trabajan los sábados por la mañana, etc., y que te avise de cualquier cambio en esta planificación de horarios
- Localiza una zona de la casa cómoda. Necesitas un espacio para que la familia pase el tiempo en él, incluso nuevos espacios para dormir, bien delimitados con plásticos en la entrada para que el polvo no se traslade de una zona a otra.
- Intenta pasar más tiempo fuera. Quizá es el momento de hacer más actividades fuera entre semana, como visitar la biblioteca por las tardes, etc. Todo sea porque merezca la pena el esfuerzo invertido…
- Busca alojamiento alternativo. Cuando se trata de reformas integrales, ten en cuenta que quizá tengas que pedir «asilo» en casa de un familiar o reservar un hotel o pensión cercano. Calcula el gasto de reservar una o dos habitaciones en un hotel si no tienes algún familiar que pueda acogerte en su casa durante la reforma integral de la tuya. En cualquier caso, no te vayas muy lejos. Si la reforma es menor, por ejemplo, un cuarto de baño o la cocina, puedes optar por quedarte en casa, previendo de antemano las incomodidades: seguramente tendrás que comer fuera o traer la comida hecha, cambiar de lugar el microondas y la nevera, y pertrecharte en una zona de la casa a salvo de los ruidos, el polvo y las molestias que ocasionan las reformas de baños y reformas de cocinas.
- Dedica un tiempo a la supervisión de la obra si estás fuera. Sería idea que pudieras dedicar al menos una hora diaria a preguntar y revisar cómo van las obras. Si tus obligaciones te lo impiden, dedica al menos dos o tres días a la semana a la tarea, y mantén un contacto fluido con el encargado de la obra, para que te ponga al día de la evolución de la misma y te consulte los detalles que necesite.
- Deja todo por escrito. Desde la fecha de inicio de las obras hasta la del fin, más los materiales perfectamente detallados, todo debe estar por escrito en el contrato de reformas integrales que firmes (y/o el presupuesto que hayas aprobado) con aquella que hayas elegido entre las empresas de reformas.
Nuestra experiencia y aproximación en las reformas de casas
En Kubo, estamos sensibilizados con el tema, y sabemos que es clave para nuestros clientes. Es tanta nuestra experiencia que empatizamos con nuestros clientes y sabemos cómo minimizar las molestias que se van a ocasionar en las reformas de pisos.
En las reformas de casas, lo primero que hacemos es analizar el tipo de obra que se va a realizar. Si se trata de una obra parcial, por ejemplo, reformas de baños, realizamos la obra completa en uno, y una vez esté terminado el primero, acometemos la reforma del segundo. De esta forma, garantizamos que la familia siempre podrá disponer de uno de los cuartos de baño para su uso personal. Cuando se trata de actuaciones parciales en otros espacios de la casa, por ejemplo, en algún dormitorio o salón, la ejecución de las obras se realiza por fases, según las necesidades de la familia. Cuando es la cocina, no hay mucha solución; mientras duren los trabajos, no se podrá utilizar dicha estancia, por lo que las comidas se deberán realizar fuera del hogar.
Otro caso distinto es el de las reformas integrales, donde tenemos todos los pasos de las reformas perfectamente planificados. Hay que demoler tabiquerías, baños, cocinas, cambiar instalaciones, etc., por lo que se hace inviable vivir mientras duren los trabajos, ya que hacerlos por fases, además de alargar el plazo, puede crear conflictos con las instalaciones. En estos casos siempre recomendamos salir de la vivienda las semanas que dure la obra, pero intentamos organizar los trabajos junto con los propietarios para que las molestias sean las mínimas.
Por esta razón, en Kubo es de máxima prioridad cumplir con los plazos pactados, ajustados precisamente para que estos trastornos duren lo mínimo posible. Hasta la fecha hemos cumplido este objetivo en todas nuestras obras. Pídenos presupuesto sin compromiso. Estaremos encantados de contactar contigo.
Puede ser una situación desquiciante porque además implica una gestión dura y mucha organización. Ocupa mucho de nuestro tiempo y una gran inversión mental. Por eso , si se puede, es mejor contar con profesionales que nos ayuden a gestionarlo