Reformas «eco»: una inversión que se amortiza

En rehabilitación de edificios, las reformas eco han llegado para quedarse. Si antes se utilizaban materiales de cualquier tipo, hoy se vigila (y mucho) de dónde proceden, su composición y si son o no reciclables. Además, este tipo de reformas consiguen importantes ahorros de energía en el inmueble final.

No te pierdas este post, en el que te contamos cómo hacer una reforma eco y por qué es interesante apuntarse a esta tendencia. Además de ayudar a conservar el medioambiente y evitar el despilfarro de recursos, podrás recuperar tu inversión en unos años.

Criterios para elegir los materiales en las reformas eco

A la hora de planificar una reforma integral, una vez obtenidos los permisos y tener claros los trabajos a realizar, el siguiente paso es calcular los materiales que se van a utilizar. En esto, una reforma eco no se diferencia de una reforma clásica. Pero además de tener en cuenta aspectos como el precio, la durabilidad o la estética, este tipo de reformas también se fijan en:

Proximidad

La búsqueda de materiales “kilómetro cero” caracteriza a toda reforma eco. Cuantos menos desplazamientos haya que realizar, menor cantidad de CO2 se generará y el consumo de energía en transporte también será menor. Y por supuesto, apostar por materiales de proximidad fomenta la industria y la producción local. Busca madera de bosques cercanos, serrerías locales, ladrillos y piedras de canteras de tu provincia…

Composición

En una reforma eco es fundamental utilizar madera de bosques sostenibles. Estas maderas siempre llevan sellos que garantizan su procedencia. Los más conocidos son el PEFC, que garantiza la gestión responsable de los bosques de todo el mundo, y el FSC, respaldado por organismos tan importantes como el World Wildlife Fund (WWF). En aislamiento, existen materiales ecológicos que sustituyen a la perfección a la lana de roca o el poliestireno: por ejemplo, puedes utilizar celulosa insuflada derivada periódicos reciclados, paneles de viruta de madera y resina o aglomerados de corcho, entre otros.

A la hora de adquirir materiales sintéticos conviene buscar los que son reciclables, como por ejemplo el PVC de los marcos de las ventanas (si quieres saber más sobre la elección de las ventanas en una reforma integral, no te pierdas nuestro último artículo sobre el tema). En cuanto a materiales constructivos, hoy día las reformas eco apuestan por los bloques de barro cocido, la termoarcilla y el mortero de cal para las fachadas.

Eficiencia energética

Una reforma integral eco no lo sería si no tuviese en cuenta la eficiencia energética que debe conseguir el inmueble. Es fundamental trabajar bien el aislamiento para reducir el consumo de energía en calefacción  y aire acondicionado: puedes informarte sobre este tema en nuestro artículo sobre cómo mejorar el aislamiento en una reforma integral. Y si existe la posibilidad de incluir sistemas de energías renovables, estupendo. Los paneles térmicos y/o fotovoltaicos, las calderas de biomasa o incluso de geotermia son instalaciones algo costosas, pero se rentabilizan en poco tiempo y son muy beneficiosas para el medio ambiente.

Soluciones de ahorro de agua

Hoy día, optimizar el consumo de agua es fundamental. Si quieres que tu reforma sea una auténtica “reforma eco”, no puedes dejar de incluir soluciones que te permitan ahorrar agua sin renunciar a la calidad de vida. Actualmente existen dispositivos económicos y fáciles de instalar que reducen el consumo de agua a la mitad; algunos, hasta el 90%. Además, estos dispositivos también ayudan a ahorrar energía. Estos son algunos de los más interesantes:

  •  Grifos de apertura en frío. Cuando abres estos grifos, el agua fría sale por defecto. Luego puedes escoger si la quieres caliente o no. Hay que tener en cuenta que cuando la caldera “salta”, se produce un consumo elevado de gas o electricidad que se puede evitar con este sistema.
  •  Latiguillos reductores de caudal. Son latiguillos especiales para los grifos del lavabo o el bidé. Reducen el caudal de agua y aumentan la presión para minimizar el consumo.
  •  Aireadores. Son unos filtros que se colocan en la boca de los caños. Mezclan el agua con aire, reduciendo el líquido a la mitad pero con la misma presión. La sensación y el efecto son los mismos, con la mitad del gasto en agua.
  •  Cisternas de WC eficientes. Las hay de dos tipos: con doble pulsador (para escoger entre descargas de agua de 6 o 9 litros) o con pulsador interrumpible (basta con volverlo a pulsar para detener la descarga).

Reformas integrales ecológicas y eficientes en Madrid

Como puedes ver, convertir una reforma integral en una reforma eco es solo cuestión de voluntad. Tal vez requiera más planificación, y puede que una inversión un poco más elevada. Pero no lo dudes: sale más que rentable. Y además de ahorrar en tus facturas, contribuirás a tener un medioambiente mejor para todos. Te invitamos a conocer nuestras rehabilitaciones de edificios para que veas todo lo que podemos hacer en tu reforma eco.